“Una mano lavará la otra”

Por Ariel Larramendi

La Habana, Cuba. - Muchos son los reportes contradictorios que llegan desde Libia sobre la situación del país y los combates en la propia capital, Trípoli.

Algunos despachos reconocen que el líder libio Muhamar El Gadaffi, no ha sido detenido, ni se sabe su destino, y mientras los rebeldes armados por la OTAN, ya se encuentran cantando victoria en plazas de la capital, hay dirigentes insurgentes que reconocen que la parte sur de Libia y la ciudad de Sirte, territorio del clan de los beduinos a que pertenece Gadaffi, se encuentra en manos de las fuerzas leales al líder libio.

Ahora que la suerte está echada sobre Libia, o el colapso es en cuestión de horas, muchos se preguntan ¿cuál será el destino de ese país del norte de África con costas al Mediterráneo?

Asimismo también se cuestionan sobre la suerte de Muhamar El Gadaffi.

Una noticia dada a conocer ayer, Muhamar el Gadaffi dijo a un ejecutivo ruso de la Federación Internacional de Ajedrez que aún se mantendría en Libia hasta el final.

Lo cierto es que en este sentido se especula sobre cuál sería el futuro de Gadaffi: si arrostraría su suerte hasta la muerte, o sería capturado por los insurgentes y en ese caso, si sería asesinado o presentado ante el Tribunal Penal Internacional.

Hay que recordar que este tribunal, calificado de inmoral, acogerá una petición de Estados Unidos, que no le reconoce jurisdicción sobre sus nacionales, y que ha obligado a más de un centenar de gobiernos a renunciar a su derecho a denunciar ante esa corte a norteamericanos responsables de violaciones, semejantes o peores, que las que se le podría imputar a Gadaffi.

Algunos especialistas coinciden en señalar que la victoria de los rebeldes armados y apoyados por los bombardeos y, últimamente, por blindados y artillería terrestre de la OTAN, no es tal victoria, habida cuenta del lodazal que a todas luces se intuye en el futuro para Libia.

El analista Atilio Borón, trata en su artículo “Sangre, Sudor y Lágrimas”, el posible futuro del líder Muhamar el Gadaffi, abandonado por sus protectores y cofrades de Occidente, tan pronto aquellos previeron la oportunidad y el oportunismo de deshacerse de él.

Otros analistas se preguntan el ¿porqué liquidar a Gadaffi, si con sus coqueteos y devaneos, con Sarkozy, Berlusconi, Zapatero, Cameron y otros altos funcionarios ingleses y norteamericanos? hacían prever que Gadaffi se mantendría a partir de un pacto no escrito con esos líderes occidentales.

Otro analista, Samir Amin asegura que toda la operación montada en contra de Gadaffi no tiene que ver con el petróleo porque las potencias imperialistas ya lo tienen en sus manos.

El objetivo esta guerra asimétrica es otro: establecer definitivamente en tierras africanas, la presencia del Big Brother, el llamado Gran Hermano: Estados Unidos, a través de su Comando Militar para África, AFRICOM, actualmente con sede en Stuttgart, Alemania, ya que los países africanos, no importa lo que se piense de ellos, se negaron a aceptar su radicación en África.

Es lógico que si una mano lava la otra, y las dos se lavan juntas, posiblemente lo que requerirá el imperialismo es una cabeza de playa en Libia, para lanzar sus operaciones militares de reconquista en África.