El ataque es el más reciente de una serie contra mezquitas y templos sufí en Pakistán y pone de relieve el desafío permanente que representan los rebeldes islámicos, los cuales han fortalecido sus posiciones en Pakistán a pesar de las ofensivas militares contra ellos con apoyo estadounidense.
Pakistán.- Al menos 50 muertos y 80 heridos dejó el viernes el estallido de una bomba que un atacante suicida hizo explotar durante las oraciones del viernes en una mezquita en el noroeste de Pakistán.
El atentado explosivo causó el derrumbe del techo del lugar y tal vez estuvo dirigido contra un activista que se opone al Talibán, dijeron las autoridades y destacó AP.
El ataque es el más reciente de una serie contra mezquitas y templos sufí en Pakistán y pone de relieve el desafío permanente que representan los rebeldes islámicos, los cuales han fortalecido sus posiciones en Pakistán a pesar de las ofensivas militares contra ellos con apoyo estadounidense.
El estallido ocurrió en Darra Adam Khel, una zona cercana a las regiones tribales de Pakistán, donde se mantienen activos los rebeldes a los que encabeza el Talibán. Cientos de fieles se habían reunido el viernes por la tarde en la mezquita suní para la oración más concurrida de la semana.
El techo de la mezquita se vino abajo y numerosas personas quedaron atrapadas bajo los escombros. Varios heridos fueron llevados en vehículos privados a diversos hospitales en Peshawar, la ciudad principal en el noroeste, de acuerdo con imágenes difundidas por la televisión.
Una mujer sacudía su cabeza mientras que dos hombres mayores de edad con ropas estaban ensangrentadas permanecían en el corredor de un hospital.
"La explosión me lanzó hacia arriba. Caí'', dijo el profesor Mohammad Usman, de 32 años, quien tenía heridas en la cabeza y brazos mientras era atendido en la cama de un hospital en Pashawar. "Después todo parecía un panteón'', afirmó.
Haji Razaq Khan, integrante del senado paquistaní procedente de Darra Adam Khel, dijo que el objetivo del atentado tal vez fue un anciano de una tribu que alentaba a las personas a que se opusieran al Talibán.
Este anciano, Malik Wali Khan, tenía una habitación de huéspedes contigua a la mezquita y se desconoce si figura entre las víctimas.
Rebeldes islámicos con frecuencia atacan a dirigentes tribales que se oponen a ellos.
Al menos 50 personas murieron y 80 quedaron heridas en el atentado del viernes, dijo el funcionario Shahid Ullah.
El ministro provincial de Información, Mian Iftikhar Hussain, calificó a los rebeldes de "bestias''.
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