Puerto Príncipe, 30 nov (EFE).- El Gobierno dominicano ve "con gran preocupación" la situación de Haití tras las elecciones del pasado domingo, cuando doce de los diecinueve candidatos a la Presidencia pidieron la anulación del proceso electoral, dijo hoy el embajador de la República Dominicana en el país, Rubén Silié. "Todo lo que ocurre en Haití impacta en la República Dominicana", señaló Silié en declaraciones a Efe en Puerto Príncipe, donde explicó que estas repercusiones obedecen a varias razones, como la presencia de una gran comunidad de haitianos en territorio dominicano y las relaciones comerciales entre ambos países.
Junto a ello, el diplomático dominicano señaló los "problemas en las relaciones fronterizas" que desde hace años han existido entre ambas naciones, por lo que "cada vez que pasa algo en Haití, siempre tiene un reflejo en la República Dominicana", indicó.
El embajador recordó los incidentes ocurridos ayer en la ciudad fronteriza de Dajabón, donde al menos cinco haitianos resultaron heridos de bala durante violentos enfrentamientos con miembros de la seguridad fronteriza dominicana, policías de su país y soldados de la Misión de la ONU en Haití.
"Por eso, no quisiéramos que pasaran cosas" en Haití, agregó el embajador en referencia a las manifestaciones que surgieron durante la jornada electoral y a la inquietud que existe en el país ante la posibilidad de que las protestas puedan agravarse.
El pasado domingo, durante las elecciones presidenciales y legislativas, doce candidatos a la Presidencia denunciaron un "fraude masivo" en el manejo de las votaciones y pidieron la nulidad del proceso, lo que desencadenó manifestaciones de protesta en Puerto Príncipe y en varias ciudades del país.
Dos de esos candidatos, Mirlande Manigat y Michel Martelly se desvincularon ayer de esta solicitud y pidieron que el proceso electoral siga adelante.
El embajador confió en que la situación "no se va a complicar más. Creo que estamos en vías de restablecer el orden y la tranquilidad, no en un escenario de conflictos callejeros violentos como los que se dieron entre 1995 y 2005. Ya esa mecánica de bandas dejó de operar en Haití".
Silié subrayó el papel de los organismos internacionales y de las representaciones diplomáticas internacionales en las conversaciones y reuniones mantenidas durante las últimas horas para tratar de conseguir una normalización de la situación.
"Todo el mundo ha desplegado todos los esfuerzos que ha podido, tratando de acercarse a los candidatos para hablar con ellos y solicitarles ecuanimidad. Pienso que esta situación se puede normalizar de aquí a una semana", agregó.
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