viernes, 26 de noviembre de 2010

Vaticano prepara carta con instrucciones contra pederastia



AGENCIA PRESS.- El Vaticano anunció que prepara una carta circular dirigida a todos los obispos del mundo con instrucciones concretas y homologadas sobre cómo afrontar los casos de abusos a menores por parte de sacerdotes católicos.

El documento estará dirigido a las conferencias episcopales y contendrá la guía para elaborar un programa coordinado y eficaz al respecto, indicó el prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, William Joseph Levada. El tema fue abordado durante una reunión del Papa Benedicto XVI con 150 cardenales, en la cual se abordó la respuesta de la Iglesia Católica ante la crisis por los curas pederastas.

La jornada "de oración y reflexión" de este viernes, convocada por el Pontífice para tratar sus preocupaciones más importantes, despertó el interés de la prensa por tratarse de la primera vez en que se aborda el escándalo de la pederastia con tantos purpurados juntos.

En la reunión a puerta cerrada, el cardenal Levada recordó la ley eclesiástica vigente para la atención de estos delitos e insistió en la "amplia responsabilidad" de los obispos en la tutela de los fieles a ellos confiados. Mencionó como ejemplo al Papa por su actitud de escuchar y acoger a las víctimas, habló de la colaboración con las autoridades civiles, de la necesidad de un eficaz empeño en protección de los niños, así como en la formación de los futuros sacerdotes. Tras el discurso de Levada tomaron la palabra 12 purpurados, la mayoría de los cuales abordaron el tema de la pederastia.

Se recomendó pedir a las conferencias episcopales que desarrollen planes eficaces, completos y decisivos para la protección de los menores, que tomen en cuenta los múltiples aspectos del problema, indicó el Vaticano en un comunicado. Tras participar en la asamblea, el cardenal mexicano de Monterrey, Francisco Robles Ortega, dijo en entrevista que la Iglesia exige tratar con sumo cuidado los casos de abuso, atendiendo en primer lugar a las víctimas y a la legislación de los países.

Apuntó que, como Benedicto XVI, todos los obispos deben asumir la seriedad del problema para afrontarlo "con mucha verdad, con mucha caridad y con mucho dolor", considerando a la crisis como un motivo de purificación para la Iglesia. Reconoció que en el pasado los jerarcas eclesiásticos gestionaron las denuncias como mejor entendían y tratando de evitar el escándalo cosa que, reconoció, "se daba mucho". "Ahora las cosas han cambiado", aseguró.

"Creo que en México hemos tomado conciencia todos y se han aplicado estos términos (exigidos por El Vaticano) en cada caso que se ha presentado, aunque no se han difundido públicamente", estableció

No hay comentarios:

Publicar un comentario