No le queda bien a Miguel Vargas

Una de las cosas que no le queda bien a Miguel Vargas y al PRD, es estar acusando al Presidente de la República y del PLD, Leonel Fernández, de utilizar el poder para favorecer a los candidatos de su organización en esta campaña electoral, en la que se elegirán los cargos congresuales y municipales que nos representarán del 2010 al 2016.

Pues resulta y viene a ser, que el menos indicado para crear un revuelo en la opinión pública nacional, así como vender una falsa imagen del Presidente de la República, es el dictador del PRD, ya que fue precisamente él quien durante su función como Secretario de Estado de Obras Pública, se trazó como plan principal convertirse en una figura de principalía no solo en su organización sino a nivel del país, tomando las herramientas que proporcionan los medios de comunicación. Logrando en efecto que algunos medios se prestaran para este proyecto personal, sin tomar en cuenta que éste como funcionario no podía utilizar la Cartera que dirigía, ni mucho menos el dinero que se recauda por concepto de los impuestos que paga el pueblo.

Hubo incluso un programa radial de los más importantes del país, que siempre estuvo en coordinación permanente con Miguel, para difundir y hacer producir un efecto propagandístico a favor de su persona, cada vez que, Obras Pública cumplía con su función de dar asistencia a las comunidades que exigían la solución a sus problemas. Por eso se inventaron lo de “Mike el que resuelve, “cuando en realidad era el Estado.

Solo bastaba que el hoy presidente del PRD, anunciara la posibilidad de ir en auxilio de algunas comunidades para que inmediatamente comenzara un gran despliegue propagandístico tendente a convertir lo en un personaje imprescindible para que su organización pudiese llegar al poder en el 2008.

Sin embargo, ni lo que hizo Hipólito desde el pode, ni lo que hizo Miguel, le valieron para quedarse y retener el poder, ya que esto no era suficiente, se necesitaba el favor del pueblo, que es lo que no tienen ellos, diferente a los candidatos del PLD que gozan del fervor popular.

Y es que Miguel Vargas no recuerda que durante el gobierno de su organización, los generales Sierra Pérez y Zorrilla Ozuna, ex jefes del Ejército y Fuerza Aérea, andaban a la luz del día, distribuyendo dinero a favor de la reelección de Hipólito Mejía, mientras que por otro lado Guido Gómez que era el consultor Jurídico de la Presidencia, vivía expresando que las posiciones públicas, primero eran para “nosotros y después para nosotros”, refiriéndose a los perredeístas, pero también el mismo actual presidente del PRD se albergaba como un triunfo suyo, como si fuera con su dinero, la realización de los juegos Panamericanos.

Dónde estaba el caudillo del PRD cuando los militares andaban como en los doces años, con banderas y símbolos alusivos al PRD en la punta de los fusiles. ¿Pero es que no recuerda Miguel que Hipólito y la mayoría de los funcionarios de su gobierno, se desmontaban de sus vehículos y del helicóptero en que viajaban con enormes cantidades de dinero sacado de las arcas del Estado, para usarlo en la compra de consciencia?

Es que Miguel Vargas nos considera pendejos, para no darnos cuenta, que la campaña propagandística y hasta publicitaria que Álvaro Arvelo y el Gobierno de la Mañana durante los cuatro años de gobierno, llevaron a cabo, no era con su dinero sino con los del Estado, como sucedía también cuando el mayor general Sierra Pérez envalentonado con el proyecto de reelección de Hipólito, andaba a la clara, haciendo pronunciamientos a favor de su jefe y del PRD sin importarle que la constitución de la República, no le da la facultad para usar el uniforme Militar con esos fines.

Miguel Vargas, lo que tiene que hacer es, decirle la verdad monda y lironda a sus dirigentes y militantes, porque en verdad, la culpa del declive electoral del PRD, no la tienen sus partidarios, ni mucho menos el PLD y Leonel, que hoy más que nunca, para seguir encauzando a la nación por el camino del progreso, está respaldando a sus candidatos como lo hizo el Presidente Obama, cuando en estos días participó en una asamblea para recabar fondos para su organización y que sepamos nadie en este mundo, lo acusó de utilizar los recursos del Estado.

Por: Francis Pérez